No importa si son casas sencillas o elegantes, las flores siempre serán un elemento que brinda un efecto positivo ambiental y visual.
Tener flores en casa genera equilibrio en la decoración y expresa contacto con la naturaleza. Relajan, dan frescura, belleza y armonía al hogar. Son tantos sus efectos que conllevan beneficios en distintas situaciones del hogar.
Las ventajas de tener flores en casa
Las flores, ya sean sembradas o en floreros, imprimen mucha vitalidad a nuestro entorno. Puede ser incluso un arte el saber colocarlas en los rincones para agregar equilibrio, creatividad y prosperidad, como lo pregona el feng shui.
Las flores con distintos colores y aromas pueden dar energía y espiritualidad y son un símbolo de primavera, de florecimiento y de sana renovación.
Relajación automática
Para tener flores en casa no necesitas de cambios de diseños ni muebles especiales. Sean exóticas o sencillas reactivan todos los sentidos y generan un mayor bienestar emocional y físico.
Además, pueden acompañarte en todos los rincones de la casa, desde un jardín, ventanas, salas, cocinas, baños y dormitorios, para relajar y proporcionar salud.
Oxigenación floral
Las flores tienen la propiedad de purificar el ambiente que se respira en casa, especialmente las de hojas verdes y anchas en sus tallos. Cada flor interviene en el proceso de fotosíntesis y ayuda a transformar el dióxido de carbono en oxígeno.
También contribuyen a humidificar los ambientes, gracias a la exudación de sus pétalos y hojas. Por esta condición son capaces de contrarrestar partículas del ambiente, como el polvo.
Cualquiera de las 30 especies de gerbera así como el cactus de Navidad (Schlumbergera truncata) son las que más oxígeno generan.
Terapéuticos en espacios reducidos
Esta propiedad de oxigenar es de mayor beneficio cuando se trata de espacios de reducida ventilación.
Se resalta aún más si son flores de efectos medicinales o terapéuticos sanadores, como el jazmín, lavanda o rosas.
El olor y también las tonalidades de estas flores ayudan a minimizar el estrés y a conciliar el sueño. Optimizan el ánimo y brindan una mejor sensación en la garganta.
Flores según cada rincón
Sobran las ideas para contar con el placer y obtener los beneficios que proporcionan tener flores en casa.
Recibiendo el agua y el sol que necesitan, se puede disfrutar de su decoración y aroma. Entran allí claveles, margaritas, geranios, rosas místicas y muchísimas otras variedades.
- Para la sala: en ese lugar desde el cual los visitantes se hacen una opinión acerca del ambiente de la casa y de la personalidad de sus ocupantes, son perfectos los tulipanes, rosas, girasoles y margaritas.
- Para la cocina: suele ser muy iluminado y el lugar donde las personas pasan gran parte de su tiempo en casa. Valen los jarrones y macetas. Las orquídeas destacan el ambiente, dan originalidad y sobriedad.
- Concepto abierto: en viviendas con espacios integrados y sin paredes, los tulipanes, así especies de color naranja o amarillo, quedan perfectos. En este contexto valen, por supuesto, las flores artificiales.
- En el baño: aquí hay que optar por colocar flores según las dimensiones de esta parte de la casa. Para baños pequeños, pues irán ornamentos florales reducidos y si son más espaciosos, no hay tantos límites para usar arreglos de gran tamaño.
Para las salas de baño y terrazas pequeñas puedes escoger tulipanes, orquídeas, uno o dos girasoles. También violetas, narcisos o aves del Paraíso.
Como ves, las flores son un elemento primordial en la decoración o ambientación de una casa. Sus colores vivos aportan paz y son una manera de sentir más de cerca la naturaleza.