Las flores triunfan en las películas
Como no podía ser de otra manera, el séptimo arte también cuenta con las flores como protagonistas de sus películas o dándoles un papel fundamental en la historia que quieren contar. Hoy os hablamos de dos películas que introducen el mundo de las flores: Big Fish y La Bella y la Bestia. Pero hay muchas más, ¿Quién no recuerda el amplio campo de amapolas en el Mago de Oz o el gran campo de tulipanes que aparecían en la primera escena de Blue Velvet?
Big Fish
No hace falta ser un experto en cine para decir que Tim Barton es bueno, muy bueno. En cada una de sus películas nos traslada a un mundo lleno de color y fantasia, donde nada es imposible. Si has tenido la oportunidad de ver esta película seguro que recuerdas esta escena.
Sandra abre la ventana y se encuentra un campo infinito de narcisos, en el medio está Edward esperando para declararle su amor:
• ¡Narcisos!
• Son tus flores favoritas.
• ¿Cómo has podido encontrar tantas?
• He llamado a todas las floristerías de cinco estados, les dije que era la única manera de que mi esposa se casara conmigo.
• ¡Ni siquiera me conoces!
• Tengo el resto de mi vida para conocerte.
¿Por qué narcisos y no flores? ¡Quizás el significado de esta flor nos explique porque el fabuloso director de cine, Tim Barton, decidió trasplantar narcisos reales al set de rodaje de la película durante todo un fin de semana.
El narciso representa los nuevos comienzos y la vida eterna. Se dice que un único narciso predice una desgracia, mientras que un ramo indica alegría y felicidad ¿Qué estaría buscando Edward cuando planto tantos narcisos a los pies de la casa de Sandra? ¿La felicidad eterna?
La bella y la Bestia
En una de las películas de animación, más vistas y más importantes del cine, la Bella y la Bestia. Una flor, la rosa, tiene un papel fundamental y es la clave de la película.
En el prólogo de la película, un príncipe rechaza dar refugio a un mendigo que a cambio de su hospitalidad le ofrece una rosa. Tras ser rechazado, el mendigo se convierte en una bruja y transforma al guapo principio en una bestia, dejándole la rosa como recordatorio de que antes de que el último pétalo de la rosa se marchitara deberá encontrar el amor para conseguir romper el hechizo.
Si no fuese por la rosa y el hechizo de la bruja, quizás no hubiésemos podido disfrutar de esta maravillosa historia de amor y aprender que la verdadera belleza siempre está en el interior.