Si te gustan las flores y desde hace tiempo has querido iniciarte en este mundo, ten en cuenta estos consejos para aprender sobre su cuidado. Deja a un lado las malas experiencias si antes intentaste cultivar flores y si se te marchitaron o pudrieron.
Si te interesa la jardinería, pero no tienes ni la más remota idea de cómo cuidar las plantas, compartimos 7 trucos claves para que este año puedas cuidar y disfrutar de tu pequeño jardín florido, aunque seas un novato.
Guía básica sobre cuidados de plantas para primerizos
1. Escoge el espacio para tu jardín
Cuidar una planta con flores es una manera de tener en nuestro hogar un pedacito de naturaleza que nos anime y nos llene de vida. El primer paso es evaluar el espacio del que dispones.
Si no tienes terraza ni patio, comienza en tu balcón o en cualquier sitio de la casa que reciba algo de luz solar. Si no tienes entrada de luz natural, no te preocupes, hay flores que soportan estas condiciones. Eso sí, tus plantas nunca deben impedir el paso.
2. ¿Con qué flores empezar?
Si solo dispones de un estrecho balcón empieza con plantas florales que no crezcan mucho y que no necesiten extender tanto sus raíces. Empieza siempre por plantas de pocos cuidados.
En el vivero más cercano a tu casa te pueden recomendar qué especies florales autóctonas se dan mejor en tu zona. Hasta las jardineras miniaturas o bonsáis pueden ser una manera de comenzar con tus mini flores. Lo mejor: son fáciles de mantener.
3. Es hora de buscar tus herramientas
Puede que ya tengas en casa alguna de las herramientas que necesitas, como regaderas, pulverizador, tijeras de podar, palas, sierra, rastrillo. Los pulverizadores son ideales para humedecer las hojas.
Existen vaporizadores que hacen un efecto de suave neblina para mantener tus flores preciosas cuando hace más calor. Solo escoge tus utensilios de buena calidad. Con dos o tres básicos bastará para comenzar.
4. ¿Cómo cuidar tus flores?
Dependiendo del tipo de flor o flores que quieras cultivar, necesitas garantizar el sustrato o suelo indicado para que se mantengan en óptimas condiciones.
Usa abono orgánico para aportar nutrientes a tus plantas. La tierra puede requerir de un suelo arenoso o turba. En todo caso, es importante que el sustrato no se vuelva compacto e impida que el agua drene. Incorpora grava o perlita para que esto no ocurra.
5. El momento de regar
Esta es una de las tareas más sencillas, aunque también es en la que más falla todo principiante: o se riega demasiado la planta hasta ahogarla o por el contrario, no se riega lo suficiente y se seca.
El sustrato debe mantenerse con humedad y aireación suficiente. Es decir, que la tierra no se vea lodosa ni con charcos. Todos los días hay que regar las especies florales en verano. En invierno, cada 7 días o más si está en plena floración.
6. La mejor hora
Riega temprano en la mañana o cuando cae el sol. Si no tienes mucho tiempo, hay regadores automáticos que pueden hacer este trabajo.
Usa macetas con drenajes en el fondo para que el exceso de agua salga. Coloca un plato contenedor abajo para que el líquido sobrante pueda ser reutilizado por la misma planta después.
7. Luce una jardinera siempre con flores
No uses fertilizantes todo el tiempo. Solo a comienzos de la primavera y hasta que empiecen a florecer. Basta con una buena tierra abonada para que se mantengan bellas.
Plantar varios tipos de flores con distintos tiempos de floración en una misma maceta es buena idea para lucir todo el año de un jardín florido en tu hogar. Solo estate atento que cuente con drenaje suficiente y un plato que evite el encharcamiento.
Por último, recuerda remover las flores secas y ramas que caen para que no pudran la tierra y cuídalas de los ataques de las plagas con remedios libres de químicos tóxicos.