3 tipos de abonos orgánicos económicos que puedes obtener fácilmente
Se conoce como abonos orgánicos a aquel abono que proviene de los residuos orgánicos o naturales. En definitiva, son fertilizantes naturales que nos ayudan a fortalecer y a enriquecer nuestros jardines o huertos de forma sencilla y lo más importante, económica. Cabe destacar que existen gran cantidad de variedad y de tipos.
Si estas preocupado por la salud de tu jardín y de tus plantas lo mejor es dejar de recurrir a los inconfundibles abonos químicos y comenzar a utilizar abonos orgánicos.
Hoy por hoy todo producto ecológico está de moda, no se puede negar, y son muchos los que desde hace relativamente poco utilizan de nuevo los abonos orgánicos, pero la verdad es que este tipo de abonos se ha utilizado desde los comienzos de los tiempos.
Para poder cultivar alimentos o plantas ornamentales con “salud” lo más importante es estudiar la tierra para saber qué tipo de abono orgánico es perfecto para cada caso. El uso de un tipo u otro depende en su gran mayoría del rápido acceso que tengas a él, pero como decimos es mejor analizar la composición de la tierra para saber que abono se adecúa mejor a la tierra. Hoy os hablamos de 3 tipos de abonos orgánicos que podéis utilizar:
Compostaje o compost: Este abono vegetal se obtiene gracias a la descomposición de restos orgánicos como ramas, hojas, césped, entre otros muchos. Este tipo de abono se puede encontrar en los bosques o también podemos hacerlo en nuestra casa a distintos niveles.
Turba: Este tipo de abono es el resultado de restos vegetales que se han descompuesto con alto nivel de humedad y bajo nivel de oxígeno. Existen diferentes estilos de turba, rubia, parda y negra, su nivel de carbono aumenta dependiendo de lo oscuro que sea el color.
Estiércol: Quizás es el abono orgánico más conocido, se obtiene de los excrementos de los animales. Dependidendo del animal del que provengan los excrementos varía el nivel de nutrientes que posee el estiércol.